Hacer la maleta el mismo día del viaje, normalmente es unas horas antes, da igual cuán largo sea el viaje, una lista con lo que hay que llevarse y listo.
No dormir, o como mucho, dormir mal y poco.
Salir temprano para llegar pronto y aprovechar el día porque cuando se viaja, se viaja lo imprescindible, normalmente lo justo, así que la tónica es hacer mucho en poco tiempo, o ir sin prisas para disfrutar de poco en un tiempo más dilatado.
Una mochila, siempre una mochila, ropa cómoda, música, algo para leer y escribir, la documentación, las llaves, dinero, el móvil y algo para llevarse a la boca si el viaje es largo.
Coger un avión como quien coge un autobús.